jueves, 7 de octubre de 2010

Del Libro “Soy mujer, soy invencible ¡y estoy exhausta!” de Gaby Vargas….



LAS PALABRAS CAMBIAN VIDAS


“¿Eres tan estúpido que no puedes hacer nada bien?”

Son las 6:30 de la mañana y esperamos la salida del avión en el aeropuerto de la Ciudad de México. No he despertado del todo cuando escucho a una mamá casi gritar esas palabras a su hijo de unos siete años.

Sí, estoy de acuerdo, la hora es criminal y, sin desayunar, cualquiera se pone de mal humor. Sin embargo, estoy segura de que si esta señora estuviera consciente del impacto que sus palabras causan en su hijo, pensaría dos veces antes de soltarlas con tanta facilidad.

¿Que lo dice a la ligera y sin darse cuenta? Si, es sólo un momento y son unas cuantas palabras, pero su eco puede durar muchos años grabado en esa pequeña memoria que absorbe y guarda todo, y el día de mañana brotará en los momentos menos afortunados: “¿Eres tan estúpido que no puedes hacer nada bien?”

Las palabras son la herramienta más poderosa que tenemos como seres humanos, en especial las mamás. Nos conectan o desconectan con las personas, forman la historia – nuestra historia-, provocan guerras o inspiran a países enteros.

Pueden motivar, crear, formar; y también pueden envenenar, criticar, ofender, herir o destruir.

A todos nos dijeron: “Ten cuidado con el fuego”; sin embargo, sería 10 veces mas útil si alguien nos advirtiera desde chicos: “Cuidado con las palabras.”

¿Te imaginas que esa misma mamá, bajo las mismas circunstancias, le hubiera dicho a su hijo algo como: “Pero, ¿cómo, mi vida? Si tú siempre haces todo muy bien, ¿qué te pasó? No te preocupes, no pasa nada.”


¡Qué diferente experiencia para todos!, ¿no crees?

No hay comentarios:

Publicar un comentario