Del Libro “Fracasos
EXITOSOS” de Bernardo
Stamateas
Errar es de valientes…
¡Qué dicho
popular tan conocido y por cierto tan verdadero!
ERRAR ES HUMANO
dice la sabiduría popular y tanto vos como yo somos seres humanos, por ende,
erramos.
El camino al
éxito está lleno de fracasos, logros y dificultades y todos ellos forman parte
del proceso.
La profesora Lisa
Amos establece, de acuerdo con estadísticas realizadas, que los empresarios
antes de alcanzar el éxito traspasaron una tasa de error y de fracaso del 3.8%.
Estas personas
supieron aceptar el fracaso, pero no permanecieron en él.
Lo analizaron, lo
estudiaron y se encargaron de revertirlo hasta consolidar los resultados
esperados.
Los errores no
tienen por sí mismos poder y autoridad para subestimarnos, ni para hacernos
desistir del sueño que alberga nuestra mente y nuestro espíritu.
El poder de desestimarnos y menospreciarnos se los
otorgamos nosotros. Nadie, excepto
nosotros mismos, está en condición de determinar si hemos fracasado o no.
Juzgar el proceso
significa desenfocarnos del objetivo final.
El proceso es
justamente un período de tiempo de preparación, de elaboración, de prácticas de
ensayo y error, y de aprendizaje.
Sugerí, probá y
equivocate. Disponé de este tiempo de prueba,
está permitido; y recordá que las personas producimos resultados, no
procesos. El proceso no define el
resultado, sólo es parte de él.
El éxito
requiere de esfuerzo, energía, tiempo, voluntad y, por sobre todo, dominio
propio y constancia de persistir hasta el final.
Tal vez, en la
marcha, avancemos dos pasos para adelante y retrocedemos tres, pero te aseguro
que al volver a intentarlo mejorarás a pasos agigantados.
“Las faltas se transforman en fracasos cuando de
continuo reaccionamos antes ellas incorrectamente”
John Maxwell.
El propósito nos
motivará y dirigirá nuestra atención de manera tal que el error no tenga la
capacidad de detenernos ni amedrentarnos.
Según Washington
Irving, “Las mentes grandes tienen propósitos; las otras tienen deseos”.
Los deseos son
ilusiones, ganas; los propósitos son
realidades.
El propósito definirá al fracaso como una
situación pasajera y momentánea, fijará tu perseverancia y te consolidará hasta la concreción de tu meta.
El propósito te
hará estar enfocado, pese a todo. Tu
propósito te diferencia, te llena, te completa y te hace sentir satisfecho.
Una persona
con propósito no se detiene a envidiar los éxitos y los logros ajenos; los celebra y los aplaude.
Un hombre y una
mujer con propósito se consolidan mientras actúan. Algunas veces pierden, pero son muchas más
las que ganan y adquieren ventaja.
Ahora bien, ¿Cuál es tu propósito…?; ¿a dónde querés
llegar?; ¿cómo querés ser recordado?
Determínalo ____________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________
Vivir con
propósito hará que todo lo que hagas cobre sentido y prosperes en todo lo que
emprendas…
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