jueves, 19 de noviembre de 2015

Del Libro “La vocecita” de Blair Singer





No tienes que preocuparte por tus clientes, tu jefe, tu cónyuge, tus problemas financieros ni nada de eso.
     Todo lo que debes hacer es solucionar     lo que ocurre en tu interior.

¿Naciste para enseñar a las personas a navegar en Internet, a escribir, a perdonar?  ¿Es tu don ser una gran mamá o un gran papá?  Sea cual sea tu virtud, mantente fiel a ella y a ti mismo, y date cuenta de que, al preocuparte y compararte con los demás te partes por la mitad.  Si te comparas con cinco personas, te divides en cinco partes.  Reflexiona un segundo:  ¿quién eres?  Ser tú mismo es todo lo que necesitas.


Robert Pante, uno de mis maestros, lo expresó muy bien:  “Mira, al nacer recibimos lo mejor.  No tenemos ojos de plástico ni piel de poliéster: tampoco huesos de goma.  Nuestro cuerpo está hecho con los materiales más maravillosos.  Si tenemos una envoltura tan fabulosa, ¿no tendría que ser el contenido igual de bueno o mejor?  ¿Usarías una caja fuerte de cinco millones de dólares para guardar un clip de dos centavos?  Sería absurdo.  Evidentemente, lo que está dentro es más valioso que lo de afuera”. 



No hay comentarios:

Publicar un comentario