jueves, 17 de abril de 2025

Del Libro “Conversando con Mayuyi” de Alicia Campos Vera - Despedida del amigo de la infancia

 

Del Libro “Conversando con Mayuyi” de Alicia Campos Vera

 


En una mesa cercana a la entrada se habían acomodado los más jóvenes del grupo, entre ellos los nietos de Adolfo y las hijas de Olivia, quienes compartían lo difícil que era separarse de los amigos. Justo cuando Mayuyi se aproximaba a la mesa, escuchó decir al menor del grupo que al despedirse de su amigo sintió que una parte de su vida se iba con él. Después de saludar a todos, la mujer retomó el tema diciendo:

— Así que perdiste a un amigo.

— Mi mejor amigo desde el kínder se fue a vivir a otro país.

— Con razón bien dijiste que una parte de tu vida se iba con él. Debe ser muy doloroso.

— Ya tiene varios meses de eso, pero aún lo extraño. Era mi confidente, mi aliado y mi cómplice.

— Una combinación que no es fácil de encontrar.

— Tiene razón, tengo muchos amigos, pero con ninguno me siento con la confianza de platicarle todo como con mi amigo Pepe. Aunque conforme pasa el tiempo, ya tampoco puedo platicarle todo a él porque hacerlo en videollamadas no es lo mismo, y seguido me corta porque tiene otras actividades o le están hablando sus nuevos amigos.

— Tal vez tengas que trabajar en el apego y dejarlo ir.

— ¿Dejarlo ir?

— Sí, al ser tan unidos, se forma un grado de apego, de dependencia, de hacer las cosas solo con él, aun teniendo a más amigos, pero, como bien dices, él ya tiene nuevas amistades y círculos sociales, lo cual está bien; entonces, tal vez debas dejar ir a ese amigo incondicional de tu infancia y aceptarlo ahora como ese amigo en el extranjero al que solo podrás ver o contactar de vez en cuando.

— Creo que ya entendí, debo cerrar mi círculo de duelo.

— Dicho de otra forma, sí, es correcto.

— Es lo que me ha dicho mi mamá.

Todos habían estado muy atentos al diálogo, porque de alguna forma se identificaban con el acontecimiento del muchacho, pero cuando Janeth escuchó la palabra duelo, entró en confusión.

— Pero ¿por qué hablan de duelo si no se ha muerto?

El duelo es solo un proceso para sanar el dolor de perder algo o a alguien, y en este caso se ha perdido al amigo de la infancia, al confidente, aliado y cómplice de una etapa de la vida.

— Oh, es cierto, ya entendí.

— Además, los amigos del alma son los hermanos elegidos con el corazón, así que es una pérdida significativa por el hecho de estar lejos.

— ¿Entonces tiene que pasar por la negación, ira, negociación, dolor y aceptación? — dijo Janeth en forma pausada mientras recordaba lo que en varias ocasiones había escuchado en las pláticas sostenidas entre su madre y Mayuyi.

— Es correcto.

— Negación no hay, porque es un hecho que ya no está aquí; ira no siento, pero dolor, aunque leve, sí existe porque lo sigo extrañando, aunque creo que cada vez menos.

— Igual una carta de despedida al niño de la infancia y una carta de bienvenida al amigo adulto te pudiera ayudar — dijo sonriente Mayuyi en señal de que era algo positivo.

– Qué buena idea. Yo ya había empezado la carta de despedida porque mi madre también me la sugirió, pero sentía que la estaba haciendo para un amigo que murió, sin embargo, despedir a un amigo de la infancia tiene más sentido, y aceptarlo ahora como un nuevo amigo creo que me va a hacer sentir bien.

Las expresiones en los rostros de los muchachos eran de alegría, y Mayuyi suspiró con satisfacción al ver que las nuevas generaciones ya hablaban de forma más abierta sobre las pérdidas y el proceso de duelo. Así que se despidió del grupo para continuar su recorrido por el salón.

 

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jueves, 10 de abril de 2025

Del libro: “Del otro lado del miedo” de Mario Guerra. - Los miedos profundos

 

Del libro: “Del otro lado del miedo” de Mario Guerra.

 

Los miedos profundos

 


 

Ø  Hay cuatro temores o angustias existenciales que pueden ser considerados miedos profundos, normalmente son inconscientes y los compartimos los humanos: la muerte, la libertad, el aislamiento y la falta de sentido de vida.  

Ø  Hay quien dice que no podemos tener miedo a la muerte como tal porque nunca hemos tenido esa experiencia antes, pero el miedo es real, aunque se presente bajo la forma de angustia o ansiedad, aunque sus causas puedan no tener un sustento objetivo.  

Ø  La libertad nos atemoriza porque implica responsabilidad y asumir las consecuencias de nuestras decisiones y actos. A veces es más liberador decir que actuamos obligados por las circunstancias o “no nos quedó de otra” para justificar decisiones tomadas bajo la presión del miedo. Quien teme a la libertad prefiere una vida predecible y rutinaria.  

Ø  Como no hay una persona exactamente igual a nosotros, nadie puede pensar y sentir de la misma manera. Esto nos lleva a concluir que, en el fondo, estamos solos, aunque estemos rodeados de otras personas. Aun así, aislarnos de los otros tiene consecuencias importantes en la salud mental. Busquemos conectar con los demás en el nivel que nos sea posible.

Ø  Creer que estamos para algo en este mundo nos ayuda a vivir. Si no encontramos un significado cósmico, se hace necesario crear uno personal. No tenerlo significa caer en la angustia de pensar que nada de lo que hagamos importa o tiene sentido.

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jueves, 3 de abril de 2025

El Método H.A.B.L.A” de Álvaro Gordoa - Asociación en cadena

Del libro “El Método H.A.B.L.A” de Álvaro Gordoa

 



Quiero ponerte a prueba para ver cuántas de esas palabras puedes recordar. Échale un ojo a esta lista una sola vez y luego, sin trampas, deja pasar un par de minutos y escríbela nuevamente. ¿Listo?

 

Robot, helicóptero, dinosaurio, ballet, fuego, libertad,                                 carretera, sillón, payaso, plátano

 

¿Cómo te fue? ¿te acordaste de cuatro, cinco, dos?, ¿respetaste el orden? Sea cuál sea tu resultado, te aseguro que dentro de muy poco no podrás quitarte estas palabras de la cabeza.

En su De Memoria Artificiali (1335), Thomas Bradwardine afirma:

Supongamos que alguien debe memorizar los doce signos del zodiaco, es decir el carnero, el toro, etc.  Ha de imaginar en primer lugar un canero muy blanco… De la misma forma, a la derecha del carnero se coloca un toro rojo… Entonces el carnero, erguido, golpea con su pata derecha los grandes e hinchados testículos del toro… por medio de los testículos recordaremos que no es un buey castrado o una vaca.

 

Éste es el método de asociación en cadena, que consiste en asociar una primera idea con otra, para luego desaparecer la primera idea transformando la segunda en primer: y asociarla con una nueva segunda idea, y así sucesivamente. El chiste es que en tu cerebro únicamente tengas dos conceptos asociados en una sola imagen. Pongámosla en práctica:

Imagínate un robot.

Ahora liga a ese robot con un helicóptero. Usa tu imaginación con libertad, puede ser un robot piloteando un helicóptero, un robot que se trasforma en helicóptero, o un robot con un pequeño helicóptero en la mano. Lo importante es que estén ligados. No pongas al robot al lado del helicóptero, ¡intégralos!

Después elimina al robot y deja al helicóptero solo.

Ahora liga al helicóptero con un dinosaurio. Tomate tu tiempo. En mi mente, por ejemplo, esté el dinosaurio peleando con el helicóptero, como en película de Godzilla. ¡Pero ojo!, debo cerciorarme de no mezclar conceptos y tener presente que es un dinosaurio y no un monstruo. Entonces; dinosaurio peleando con helicóptero.

Elimina al helicóptero y deja solo al dinosaurio.

Sigue la palabra ballet. ¿Un dinosaurio con tutú te parece buena idea? Un poco ridículo ¡así funciona mejor!

Ahora deja solo el traje de ballet y lígalo con la palabra fuego. Una bailarina de ballet en llamas puede ser una imagen tan impactante como para que nunca se te olvide.

Toca el turno de unir fuego con libertad. Ésta es más difícil, pues cuando se trata de conceptos abstractos debemos esforzarnos en materializarlos. En este caso puedes usar a la Estatua de la Libertad incendiándose, o tal vez conoces a alguien que se llame Libertad y puedes ligarla de alguna forma con el fuego. Cada mente es diferente.

Deja libertad sola. Ahora te dejo continuar por tu cuenta: faltan carretera, sillón, payaso y plátano. Tómatelo con calma.

¿Terminaste? Muy bien, consigue una pluma para anotar la lista, pues lo único que tendrás que hacer es pensar en el robot y lo demás saldrá solo:

Robot,___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

 

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viernes, 28 de marzo de 2025

 

Del libro: “Un alma valiente” de Nick Vujicic

FINGIR PARA LOGRARLO

 


Lo que estamos viendo aquí no es algo nuevo para los adolescentes. Creo que la mayor parte de los psicólogos y psiquiatras están de acuerdo en que, durante la adolescencia, la mayoría de nosotros empezamos a forjar nuestras identidades, a descubrir quienes somos, en dónde encajamos y en torno a qué podemos construir nuestras vidas. Cuando estaba entrando en la adolescencia, deseaba profundamente encajar con los demás chicos. No quería que nadie me percibiera como débil ni inseguro, así es que adivina qué hice. Fingí ser alguien más. ¡Mala estrategia, Nick!

Intenté encajar actuando como un tipo duro y diciendo groserías como los chicos a los que quería impresionar. Era un comportamiento muy extraño para mí. Ni siquiera recuerdo haber escuchado una mala palabra antes de secundaria. En mi casa no se decían groserías.

Mis padres nos educaron para amar a Dios y honrarlo en todo momento. Nuestra vida estaba construida alrededor de nuestra fe. A mi hermano, mi hermana y a mí nos protegieron del mundo de muchas maneras; ni siquiera nos dejaban escuchar estaciones de radio, a menos que fueran cristianas.

Dios debió haberse sentido muy decepcionado cuando me escuchó decir groserías, pero estoy seguro de que entendió que estaba un poco perdido. Mis primeras semanas en la secundaria me abrieron los ojos. ¡Todo el mundo decía malas palabras! Por lo menos, así parecía. Escuchaba tantas groserías por todos lados que comencé a preguntarme si yo estaba equivocado y tal vez las palabras que yo consideraba malas palabras en realidad no lo eran. Era como si hubiera descubierto un lenguaje totalmente nuevo.

En serio, me convencí de que decir groserías era la forma normal de hablar de los adolescentes. Estaba desesperado por parecer normal, cool y como un tipo duro, así es que abandoné al verdadero Nick y me convertí en Nick, El Malhablado.

Comencé a decir groserías porque tenía miedo de no encajar. No tiene nada de malo querer encajar y ser aceptado, pero lo que sí es malo es abandonar tus valores y creencias para conseguirlo.

Me estaba rechazando a mí mismo con la esperanza de que nadie más me rechazara. Qué locura, ¿verdad? Todos hacemos ajustes para llevarnos bien con otras personas. Hasta cierto punto, todos tenemos que adaptarnos a lo que las personas que nos rodean quieren o necesitan. Todo eso es parte de vivir en un mundo más grande: formando parte de una familia, una comunidad, un país y el mundo.

Pero nunca deberías hacer cosas que sientes que están mal porque quieres encajar. No necesitas fingir que eres alguien más para eso: tú ya tienes un lugar en esta tierra.

Mejor prueba esto: Siéntete tan cómodo contigo mismo que las demás personas se sientan cómodas contigo también.  Crea una vida que te gaba tan feliz que quieran compartir tu felicidad.


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viernes, 21 de marzo de 2025

 

Del libro “El regalo” de Stefanos Xenakis

 

HUMOR

 




La vida es un juego y la única forma de perder es no jugar. Esa era una de las frases favoritas de mi mentor.  Nos la repetía hasta la saciedad, hasta que captábamos el mensaje.

Un día, mientras hago cola en el banco, oigo una interesante conversación detrás de mí y me paro a escuchar. Una mujer, de unos cuarenta y tantos años, está hablando con un hombre mayor. Le está diciendo lo joven que parece su padre para su edad.

– Cuando nos ven juntos, ¡la gente piensa que somos pareja! – exclama–. ¡Ahí está! Papá, ven aquí, ¿quieres?

Lo miro de reojo. Un anciano alegre se acerca a paso ligero. Tiene una sonrisa de oreja a oreja y lleva unas bermudas, una camiseta moderna y una gorra de béisbol; el eterno adolescente. Irradia energía. Es el tipo de hombre que, con solo mirarlo, ya te alegra el día. Se mete de pleno en la conversación.

– ¿Qué edad me echas? – le pregunta al hombre mayor.

– ¿Sesenta? – pregunta el tipo en voz alta.

– ¡Setenta y cinco! – declara con orgullo el “adolescente”, y deja escapar una risita.

Me doy vuelta, atónito. No me perdería la energía que irradia aquel hombre por nada del mundo.  Cedo mi tanda en la cola y me cuelo en la conversación. El anciano sonría con toda la cara.

– ¿Nos conocemos? – me pregunta–. ¿Del barbero, puede ser? – Suelta una risotada al quitarse la gorra. Está completamente calvo, como yo –. ¿Vamos juntos a clase de baile? ¿Nadas en invierno?

El tipo se lo guisa y se lo come, pero, sobre todo, nunca se olvida de reír. Ni de bromear. Por cualquier cosa, por pequeña que sea.

 

La alegría lo es todo. La risa es la hija y la madre de la alegría, como en el dilema del huevo y la gallina. Cuando estás feliz, te ríes, pero también te ríes para estar feliz. Y en la base de ambas está tu sentido del humor, que ocupa el puesto de mando de tus sentimientos. El humor es vida. Es la esperanza de que algo nuevo, algo especial, esté naciendo. El humor es la celebración de la vida.

 

Las personas con sentido del humor son más felices. No envejecen y enferman mucho menos. Brillan con luz propia, resplandecen. Vayan donde vayan, atraen la energía positiva, como si estuvieran lanzando purpurina a su alrededor. Dejan el mundo un poquito mejor que como se lo encontraron.

 

Tener sentido del humor es señal de carácter, delicadeza y elegancia.  Es algo propio de las grandes personas. 

 

Winston Churchill y la parlamentaria británica lady Astor eran conocidos por sus ingeniosas conversaciones.  Un día, lady Astor le dijo:

– Si fuera usted mi esposo, le envenenaría el té.

A lo que Churchill respondió:

– Señora, si yo fuera su esposo, me lo bebería.

 

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miércoles, 19 de marzo de 2025

Del libro “Inquebrantables” de Daniel Habif - Tus sueños

 Del libro “Inquebrantables” de Daniel Habif





“Si tus sueños no te aterran, es porque todavía estás soñando muy abajo.


Sueña hasta que te tiemblen las piernas”.


El reto del siglo es hacer más con lo que sabemos. Te aseguro que así se abrirán caminos en el

desierto y ríos en la soledad. Sentirás estas palabras solo como una inyección de entusiasmo que

durará unas horas o unos días, y después la emoción bajará y te llevará de nuevo a la confusión o

la depresión por falta de propósito.


Vivirás la motivación como un acto de magia y no como un hecho irreversible en tu vida. Debes

tatuar tu alma, reprogramar tu mente y tu corazón con los códigos de lo alto, es urgente que

limpies las telarañas de la mediocridad y te eleves a un nuevo estándar. ¡Júratelo allí donde estás!,

¡júratelo ahora mismo!, date cuenta de que no quieres cambiar, solo deseas cambiar: tú no

quieres dejar de estar deprimido, tú solo deseas dejar de estar deprimido; lo que tienes es una

lista de deseos, no de convicciones.


Ningún deseo existe sin el poder firme de decisión y de acción, pero antes de aprender hay que

desaprender. Tira lo que sabes que ya no te sirve, necesitas firmeza, no dureza. Tu promesa no se

retrasará ni un día, pero debes creer que es tuya, solo tuya, y debes pelear por ella.

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jueves, 6 de marzo de 2025

¿Cómo aprendiste a ver la muerte? Autora: Alicia Campos Vera

 

¿Cómo aprendiste a ver la muerte?   Autora:  Alicia Campos Vera

 




Analiza como has aprendido a ver la muerte, desde tu infancia. ¿Qué te dijeron tus familiares y amigos sobre la muerte? ¿Qué películas te impactaron sobre el tema de la muerte? ¿Cómo fue tu primera pérdida significativa?

Recuerdo la historia de un anciano gravemente enfermo que no quería morir, porque su creencia era que si moría se iría al infierno, pues de joven había hecho muchas cosas malas.  También hay gente que cree que deben guardar luto o vivir tristes casi de por vida, porque en las películas de antes así se veía. Hay varias películas mexicanas donde a gritos expresan “si te mueres, me mato”, o “si tu te mueres, ya no tiene caso vivir”, o “la vida sin ti, no es vida”. Por mencionar algunas. Que diferente sería que en las películas dijeran “honraré tu memoria viviendo intensamente”, o “me duele tu partida, pero te quedas en mi corazón y me darás fuerza para volver a ser feliz”, o “ya no te tengo físicamente conmigo, pero tu recuerdo no muere”, etc.

En otras culturas como la hindú y la islámica, la muerte no se ve como una tragedia sino como un proceso natural, donde al morir el cuerpo físico deja de existir, pero el alma sigue un nuevo camino. Por lo tanto, ellos celebran la muerte y se quedan con los gratos recuerdos y enseñanzas del ser querido. Esto hace que su proceso de duelo sea breve y puedan encontrar paz.

El miedo a morir, por ejemplo, en muchos casos se debe a experiencias muy desagradables a temprana edad, ya sea porque presenciaron una muerte violenta, porque la madre casi enloqueció cuando murió el padre, porque le tocó auxiliar en los cuidados de un familiar moribundo, o por una experiencia traumática en una alberca, etc. Sin embargo, nadie, absolutamente nadie nos puede asegurar como se siente morir, pero muchos podemos explicar a detalle como se siente vivir, y vivir intensamente.

Otra creencia que dificulta la aceptación y resolución de un duelo por muerte de un hijo joven, es que se cree que por ley general primero deben morir los abuelos, luego los padres y después los hijos, pero la realidad es que nuestra “línea de vida” o “fecha de expiración” nadie la sabe, y puede ocurrir cuando menos lo esperemos. Cuando me preguntan, ¿por qué aun sabiendo que todos vamos a morir algún día, nos cuesta tanto trabajo aceptarlo?, les digo que se debe a que por más que escuchamos la frase “vive hoy como si fuera el ultimo día”, en realidad no lo hacemos.

Hay quienes aprendieron a negar la muerte, creyendo que al negarla no existe, o se evita. Un ejemplo es la expresión “no voy a hacer testamento, porque estaría invocando a la muerte”, o “llamaron para ofrecer paquetes funerarios y les colgué, ¡yo no pienso morirme!”.  Sin embargo, hablar de muerte te invita a hablar de vida. Ayuda a visualizar que estás haciendo hoy para vivir (los años que tengas que vivir), de forma sana, autosuficiente e independiente. Ayuda a tener siempre tus documentos en orden y tu última voluntad por escrito, solo por si acaso. Hasta pudiera ser un motivador, para viajar, darte algunos lujos, atreverte a completar proyectos o ideas y hasta ir cerrando ciclos, para no dejar asuntos pendientes.

En el otro extremo, están los que ven a la muerte como algo maravilloso, un paso a la gloria, a donde no hay dolor, a un lugar mejor, y entonces, ante una situación agobiante o dolorosa piensan en acabar con su vida. La verdad es que no es necesario morir, para vivir una buena vida.

En conclusión: La forma en que aprendiste a ver la muerte, puede facilitar o dificultar tus procesos de duelo, y hasta tu propia muerte. Si la forma en que aprendiste te impide hablar de ella, o genera sentimientos desagradables, cámbiala por la aceptación de ésta como parte de la vida, y como un recordatorio de que debemos vivir, apreciar lo que tenemos, disfrutar el tiempo con nuestros seres queridos, aprender a despedirnos y a dejar la mejor huella posible en este mundo a cada paso que damos.

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jueves, 27 de febrero de 2025

 

Del libro: “Del otro lado del miedo” de Mario Guerra.


EL MIEDO

 

Ø  El miedo pertenece a la categoría de las “emociones negativas” y éstas se llaman así NO porque sean “malas”, sino porque producen sensaciones desagradables precisamente para movernos y alejarnos, para evitar o resolver lo que sea que las haya provocado.

 

Ø  El miedo se marcha cuando ha cumplido la función de alertarnos y ponernos a salvo, pero en su modalidad de ansiedad o angustia existencial, puede permanecer por mucho tiempo hasta que nos adaptamos o aprendemos a convivir con las causas que lo provocan cuando no es posible evitarlo.

 

Ø  Si el miedo no te mueve a evitar, afrontar, resolver o adaptarte a una situación desagradable, entonces se vuelve desadaptativo porque no conduce a nada útil.

 

Ø  No hay miedos imaginarios, lo imaginario en todo caso pueden ser las causas de tu miedo, pero el miedo siempre es real.

 

Ø  A muchas personas les gusta exponerse a experiencias que les provocan miedo, como ver una película de terror o lanzarse de un paracaídas, pero la percepción del riesgo es calculado, lo que hace que la experiencia pueda disfrutarse sin caer en pánico.

 

Ø  La ansiedad y la angustia no son exactamente lo mismo que el miedo, pero ambas forman parte de la experiencia del miedo o lo tienen como componente. Por ejemplo, la ansiedad es una forma de miedo, pero el miedo no es una forma de ansiedad.  Recordemos que el miedo es una emoción primaria. En este libro agrupo estas experiencias bajo la denominación de “miedo” para efectos prácticos.

 

Ø  Los trastornos de ansiedad van más allá del miedo y deben ser tratados por un especialista. Si vives en un estado constante de miedo por la mayoría de las cosas que te rodean y esto interfiere con tu vida o tu capacidad de disfrutarla, busca ayuda profesional cuanto antes. Un psicólogo, psicoterapeuta o psiquiatra pueden ayudarte. 

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viernes, 21 de febrero de 2025

Del libro: “Un alma valiente” de Nick Vujicic - ¿Tienes refuerzos?

 

Del libro: “Un alma valiente” de Nick Vujicic

 

¿TIENES  REFUERZOS?

 



¿Alguna vez te has tomado el tiempo de evaluar si tus amigos y demás personas cercanas son buenas o malas para ti? Te sugiero que lo hagas. En una hoja de papel, haz una lista de las personas más importantes en tu vida, quienes ejercen más influencia en ti y con quienes pasas la mayor parte del tiempo.

Luego, para cada una, has las siguientes preguntas:

1.-  ¿Nos respetamos mutuamente? ¿Por qué sí o por qué no?

2.-  ¿Confiamos el uno en el otro? ¿Por qué sí o por qué no?

3.-  ¿Esa persona me anima y me apoya?

4.-  ¿Nuestra relación me hace querer ser una mejor persona?

5.-  Si un bully me confrontara, ¿esa persona me apoyaría?

6.-  ¿Qué puedo aprender de esa persona?

7.-  ¿Necesito ser un mejor amigo de esa persona o debería alejarme de ella?

8.-  ¿Es alguien con quien tendré una relación estrecha durante mucho tiempo?

9.-  ¿Compartimos los mismos valores?

10.-  ¿Tenemos el mismo poder en la relación o uno de nosotros es más dependiente que el otro?

11.-  ¿Esa persona alguna vez me anima a hacer cosas negativas que de otro modo jamás haría?

12.-  ¿Estoy cómodo hablando sobre mi fe con esa persona?

13.-  ¿Es alguien que celebrará mis éxitos o que estará celoso de ellos?

 

Cuando hayas respondido esas preguntas para cada una de las personas cercanas a ti, revisa tus respuestas.  Considera si necesitas acercarte a las influencias positivas y alejarte de las que no son tan positivas. Es importante ser conscientes de la naturaleza de cada relación que tenemos porque a veces caemos en zonas de confort y nos aferramos a relaciones que no nos benefician y que incluso pueden ser dañinas.


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jueves, 13 de febrero de 2025

Del libro “Por el placer de vivir” de César Lozano - El enamoramiento

 

Del libro “Por el placer de vivir”  de César Lozano

 



En la etapa del enamoramiento todo lo vemos color de rosa. Vemos en nuestra pareja cualidades que tal vez no tenga, pero como la idealizamos, todo en ella nos parece maravilloso y no toleramos crítica alguna que pueda dañar la imagen del ser querido. Al respecto, le dice una amiga a una novia enamorada:

  Oye ¡que enojón es tu novio! ¡Qué mal te trata, siempre a gritos y con ofensas!

– ¿Tú crees? –  le contesta – ¡Pero en el fondo es muy bueno!

– Se me hace – le dice la otra – que a tu novio no le gusta trabajar; nunca vemos que haga algo.

– No creas eso – contestó la enamorada –, lo que pasa es que no ha encontrado el trabajo adecuado, un trabajo de acuerdo con su personalidad. En todos los lugares lo han tratado muy mal y por eso no dura, pero no es flojo. Solamente tiene cuatro años que no encuentra el trabajo ideal. Además, él nació para ser jefe, no para empleado.

¿Así o más bruta? Lo más grave es que ¡es una historia real!

El enamoramiento nos hace ver cualidades en tal o cual persona, y pasamos por alto sus defectillos, hasta nos caen en gracia. Todo en esa persona es aceptable, todo en ella es gracioso, pero la realidad es otra. El verdadero amor nos hace ver y aceptar a la persona reconociendo sus cualidades y sus defectos. Con el trato y el tiempo nos damos cuenta de que si aun con sus defectos y mis defectos el amor y la disposición pueden perdurar para seguir juntos.

Cuando una relación se basa solamente en vivir y disfrutar el momento, sin pasar de lo emocional a lo cerebral, se corre el riesgo de enfrentar en poco tiempo desilusiones y frustraciones, porque podemos descubrir en el ser que idealizamos ciertas actitudes que se convierten en un verdadero martirio y por eso se fuga la felicidad.

Por esas y otras razones, es de suma importancia estar juntos durante un tiempo razonable, cuando menos para que afloren las virtudes y defectos antes de pronunciar el “Sí, acepto”.  Decidir la convivencia para siempre con alguien implica gran responsabilidad en la pareja, renunciar al ego de ambos, mutua tolerancia, para que después no sientan que están durmiendo con el enemigo.

Eso lo viven miles de mujeres y hombres en el mundo; todos tenemos libre albedrío para elegir con quien compartir nuestra vida, formar una familia o vivir en la soltería. El resultado depende de la buena elección que hagamos.

Desde el principio, hay puntos que la pareja debe aclarar durante el noviazgo, con el fin de fincar un sólido matrimonio:

* ¿Cuántos hijos tener?

* ¿Qué importancia tiene la religión en su vida y en la de sus hijos?

* ¿Cuál es el rol que llevaremos en cuanto a orden, limpieza y recursos económicos?

* ¿Cómo ven la relación con los padres de ambos y qué tanto participan en las decisiones de ellos?

* ¿Hasta dónde llevar la convivencia con mascotas?

* ¿Afrontarán por igual las actividades en el hogar?

* ¿Trabajarán fuera del hogar los dos o sólo uno?

* ¿Están llevando un noviazgo en armonía?

* ¿Si alguno de los dos tiene vicios (alcoholismo, tabaquismo, drogas, etcétera), está dispuesto a padecerlos solo o buscar juntos la solución al problema?

* ¿Cómo se llevan con sus padres y hermanos?

* ¿Cuál es su actitud cuando conduce un vehículo? (son muy similares las actitudes que tendrá en otros aspectos de la vida)

* ¿Cómo resuelven sus diferencias con otras personas?

* ¿Sus tratos son siempre honestos?

Estas aclaraciones son básicas y no deben pasarse por alto. Además, hay otras consideraciones muy importantes para tomarse en cuenta: los sueños, los anhelos, los proyectos de vida, la fijación de metas, los celos, el tener un camino planeado donde caminarán juntos.

Lo anterior nos permitirá tener una idea de la vida en común, visualizar cómo se comportará él o ella en el matrimonio sin cegarse con la idea de que los vicios se curarán cuando estén juntos por el amor que se tienen; o un comportamiento agresivo o indiferente desaparecerá como por arte de magia el día de la boda.

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jueves, 6 de febrero de 2025

Del libro: “¡Con golpes NO! De Martha Alicia Chávez - Querido yo

 

Del libro: “¡Con golpes NO!  De Martha Alicia Chávez

 

 


Ejercicio 4.  Querido yo

 Toma dos hojas de papel y un bolígrafo. En la primera hoja redactarás una carta usando la mano que normalmente no utilizas (si eres diestro escribirás con la izquierda, y viceversa); quien la escribe será tu niño interior y la dirigirá hacia ti, comenzando con “Querido Fernando” (usa tu nombre).  Puede ser un poco complicado, ya que es probable que no tengas mucha práctica escribiendo de esta forma, pero no hay un mínimo o máximo para tu carta; puede ser un párrafo o lo que tu niño prefiera escribirte. No importa que no sepas cómo comenzar, simplemente permite que fluyan las palabras. Al finalizar, en la parte inferior escribe tu nombre, como te decían de niño, como remitente. Al terminar, léela en voz alta.

Posteriormente toma la segunda hoja; ahora le contestarás a tu niño, escribiendo con la mano que normalmente utilizas, comenzando con: “Querido Fer” (usa tu nombre). Date permiso de decirle a tu niño todo lo que te nazca, no hay límite para tu redacción. Al final escribe tu nombre y agrega tu firma. Lee tu carta en voz alta.

Puedes hacer este ejercicio las veces que desees cuando tú lo prefieras. Es muy sano mantener una comunicación con tu niño, pues aun cuando tengas ochenta años existirá dentro de ti un niño curioso, espontáneo, con miedos e incertidumbres que siempre necesitará ser amado.

Para liberar tu corazón y tu mente, el primer paso es que quieras hacerlo. Reinvéntate cada día y date la oportunidad de aprender de tus caídas; la vida es un instante para cargar la enorme lápida firmada por el pasado, y soportarla sólo hará más cansado tu camino.

No niegues lo que fuiste; más bien intégralo a ti, deja de controlar tus emociones y mejor aprende a manejarlas. Ya no excluyas los recuerdos difíciles, mejor resignifícalos y valóralos como maestros, y deja de ser una víctima y reconócete como un ser de infinitas capacidades.

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jueves, 30 de enero de 2025

Del libro “Por el placer de vivir” de César Lozano - Ofensas

 

Del libro “Por el placer de vivir”  de César Lozano

 


Recuerdo la historia de aquel niño que llega muy molesto a su casa porque en la escuela su maestro lo había ofendido al no contestar correctamente en clase. Llega tan molesto que va con su madre quien se encontraba en la parte posterior de la casa lavando, y le dice: 

“Mamá, estoy tan enojado con el maestro por lo que dijo. ¡Lo odio mamá! ¡Lo odio con todo mi corazón!”

“Hijito, veo que estás muy enojado y sientes mucha rabia, ¿verdad?, le preguntó la mamá.

“¡Sí, mamá, mucha rabia!”

“¿Ves esa bolsa llena de carbón?, preguntó la mamá.  Avienta los trozos de carbón a la sábana aquella que lavé y está secándose al viento. Hazlo con todo el coraje que sientas.”

“¿En serio, mamá? ¿Puedo hacerlo de verdad?”

“¡Sí, claro! ¡Hazlo! ¡Desahógate si es lo que tú quieres!”

Entonces el niño empezó a aventar uno a uno los trozos de carbón y, obviamente, no todos los trozos daban en el blanco, en la sábana que ondeaba a lo lejos.

Al terminarse la bolsa completa, le dijo su mamá:

“¿Te sientes mejor?”

“Sí, mamá, me siento mucho mejor.”

“Mira la sábana, le dijo la señora. Casi ni se manchó porque muchos trozos no dieron en el blanco. Ahora voltea y mírate a ti mismo. ¿Mírate cómo estás! ¡Totalmente manchado de negro!

Hijito, dijo la mamá.  Eso es precisamente lo que sucede cuando lanzas ofensas contra otras personas, el más dañado tarde que temprano eres tú mismo.”

 

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lunes, 20 de enero de 2025

 

Regreso al trabajo después de una pérdida significativa. (Autora: Alicia Campos Vera)


Reanudar actividades después de haber perdido a un ser querido, es lo más recomendable.  Para el doliente puede ser difícil y doloroso, y para los compañeros de trabajo suele resultar incómodo, al no saber cómo actuar, así que aquí te comparto algunas sugerencias:

Para el doliente:

Nadie, absolutamente nadie va a entender como te sientes, por mas detallado que se lo describas, no va a entender por lo que estás pasando; pero todos, entenderán que hay dolor y tristeza. Por lo tanto, tú decides que tanta información proporcionas y a quien. Por otro lado, si no te sientes con ganas ni de hablar, puedes informarle a tu jefe, o tus compañeros y amigos mas cercanos, que te den tu espacio, que no te pregunten, que no te abracen, que no te den el pésame, o lo que creas que te pueda incomodar, y puedes indicar que conforme vayas procesando tu duelo y te sientas mejor, tú se los harás saber.

Si te sientes torpe o sin poderte concentrar en tus tareas, háblalo con tu jefe. O si cometes un error ante un cliente, puedes disculparte y agregar que tuviste una pérdida significativa recientemente, que pudiera estar afectando tu desempeño, e igualmente comunícaselo a tu jefe, solo para que traten de entenderte.

 

Para los compañeros de trabajo:

No le digas, “sé cómo te debes sentir, porque no lo sabes; puedes tener una idea de cómo TÚ te sentirías o te sentiste, en alguna situación similar, pero no puedes asegurar el cómo esa persona se siente.

Prohibido decir “échale ganas, porque minimizas su esfuerzo.

Evita preguntar de que murió, como murió, etc. (espera que la información provenga del doliente).

Por ningún motivo des consejos no pedidos, y evita dar órdenes como: “no llores, no la dejas descansar”, “no vistas de negro”, “ya saca sus pertenencias…”, etc.

Por lo general el doliente no quiere comentarios que le recuerden su pérdida, solo quiere que respeten su privacidad, su tristeza, su coraje, y a veces solo quiere compartir (sacar) su dolor, sin ser juzgado, criticado o comparado. El que decir o que hacer, va a depender del grado de cercanía o vínculo afectivo que tengan. A veces, una mano en el hombro puede ser suficiente para mostrar presencia y afecto. La frase “mis condolencias” es preferible a “mi mas sentido pésame”. Antes de abrazar al doliente, pregúntale si puedes hacerlo y respeta su decisión.  También puedes preguntarle si quiere hablar sobre lo ocurrido. Y si en verdad no sabes ni que decir, puedes sincerarte diciendo algo como “supe de tu pérdida, pero la verdad no sé que decir”.  Por último, las tarjetas de pésame se recomiendan, porque el doliente las leerá cuando esté listo.

En conclusión: El doliente tiene derecho a procesar su duelo como mejor le funcione y sus compañeros de trabajo a respetar sus decisiones y… entre menos digan, mejor.

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jueves, 16 de enero de 2025

Del libro “Joderillo Una luz en la oscuridad” de Fidel Alcántar Pérez - Mantenimiento

 

Del libro “Joderillo  Una luz en la oscuridad”  de Fidel Alcántar Pérez

 



– Como ustedes saben, jovenzuelos, un automóvil debe recibir ciertos cuidados y atenciones para que continúe en buen estado; en una palabra, requiere “mantenimiento”.  ¿Qué sucede si ignoramos las condiciones del vehículo? No pasará mucho tiempo cuando se inicien los primeros síntomas de agotamiento, y si continuamos necios a no brindarle atención, llegará el momento en que su energía mecánica será nula. Pero si, con la debida frecuencia y calidad necesaria e indispensable dieran servicio a su vida, es decir, estuvieran dispuestos a hacer un cambio, con toda seguridad tendrían la fuerza que es menester y el intelecto disponible para dar los pasos hacia delante que les permitan alcanzar la cima del éxito.

Cambien el aceite para que sus emociones puedan liberarlos de cualquier fricción. 

Renueven el agua y agreguen un anticongelante para evitar que se transformen en locos y tontos iracundos.

Reemplacen las bujías de su cerebro para que puedan pensar antes de actuar y no cometan torpezas intelectuales.

Coloquen los filtros necesarios para atrapar la envidia y la avaricia. 

Revisen su sistema de frenado para que la prudencia y la concordia los acompañen durante el recorrido.

Viertan líquido para el volante, el cual les ayudará a mantener el control de sus maniobras, y dirijan sus acciones atinadamente.

Finalmente no olviden el conducto del escape para que arrojen el tóxico egoísmo de su alma.

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viernes, 10 de enero de 2025

Del libro “Dios nunca parpadea” de Regina Brett - No compares tu vida

 


Del libro “Dios nunca parpadea” de Regina Brett

No compares tu vida…

 


Puedes ser cualquier cosa – doctor, abogado, trabajador social, alcalde, presidente, columnista –, ¿pero por qué no descubrir tu llamado?

No importa lo que te ha sucedido, importa lo que haces con los que te ha sucedido. La vida es como un juego de póquer. No puedes elegir las cartas, pero depende de ti totalmente cómo juegas tu mano. Una de mis líneas favoritas en la película Harry Potter y la cámara de los secretos es cuando el gran sabio Dumbledore le dice a Harry: “No son nuestras habilidades las que muestran quiénes somos realmente. Son nuestras decisiones”.

La elección, no la casualidad, es lo que determina tu destino. Depende de ti decidir lo que vales y cómo eres significativo para el mundo.  Nadie más tiene tus dones, tu serie de talentos, ideas, intereses. Eres un original, una obra maestra.

Muéstrale al mundo el milagro de tu ser. Fíngelo hasta lograrlo. Todos fingimos. Los más grandes escritores se levantan todos los días sobrecogidos por el temor de no poder volver a escribir otra palabra interesante. Los líderes de negocios más importantes se levantan preguntándose si hoy es el día en el que el mundo descubrirá la gran farsa que representan. Los lideres religiosos más importantes luchan diariamente con la fe. Los grandes líderes políticos se preocupan de que cada decisión les cueste la siguiente elección.

Nadie se siente con una confianza o una seguridad absoluta. Obtenemos sólo pequeños destellos de ello. Todos tenemos miedo de cometer el error que arruine nuestras vidas. Probablemente no haya tal cosa. Incluso si cometiéramos cada uno de los errores que, según nosotros, nos arruinarían, nuestra vida no se vendría abajo. Sólo cambiaría.

Todos tenemos miedo de estar haciendo mal las cosas, de no agradarle a la gente, de no ser lo suficientemente listos, lo suficientemente buenos, lo suficientemente exitosos, lo suficientemente atractivos.  No luches contra ello.  Conviértelo en un miedo como de montaña rusa. Disfruta los saltos, las curvas pronunciadas, las subidas y las bajadas, las sacudidas que casi te hacen sacar el almuerzo. La vida te pateará como si fueras el balón del Mundial de futbol. Mantén tu rebote. Disfruta el paseo. El miedo y la emoción se llevan muy bien.

No intentes ocupar el lugar de nadie más.  El mundo no necesita que seas la Madre Teresa, Gandhi, Martin Luther King, Michael Jordan, Maya Angelou o Bill Gates. El mundo necesita que seas tú.

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lunes, 6 de enero de 2025

¿Debo ir al funeral de mi ser querido? Autora: Alicia Campos Vera

 ¿Debo ir al funeral de mi ser querido?  Autora:  Alicia Campos Vera


¿Debo ir al funeral de mi ser querido?

 

Los rituales funerarios son una forma de despedir al ser querido, de expresar amor, admiración, respeto, etc.  Son costumbres y tradiciones, familiares, sociales y culturales, que pueden unir a familias en su dolor, recuerdos, sentimientos mutuos, y despedida del ser amado.

El sepelio suele ser la parte mas dolorosa, ya que confirma y valida que la persona ya no estará nunca mas físicamente en este mundo, pero no deja de ser una forma de ayudar al doliente a aceptar y procesar su pérdida, a concientizarlo de su nueva realidad y también a iniciar su proceso de duelo acompañado de quienes se unen con sentimientos similares.

Ahora bien, NO ES OBLIGACIÓN asistir a dichas ceremonias y actos solemnes (misas, funeral, entierro), es una ELECCION PERSONAL el atender, o no ir a los rituales funerarios.   Hay muchas formas de despedirse del ser amado, y de procesar el duelo a su debido tiempo, y debemos RESPETAR las decisiones de cada quien. Ya bastante tiene el doliente con el peso de la pérdida y los sentimientos y emociones asociados a la misma, como para agregarle la crítica y la presión social y familiar, por no ser partícipe de dichos rituales.

Como doliente estas en todo tu derecho de elegir no ir al velorio.  Para algunos puede representar un sentimiento tan fuerte, que rebasa su umbral de dolor y hasta pudiera afectar su salud. Para otros es demasiado incómodo el aroma a flores, incienso y velas de la funeraria. También puede ser una forma de negar la pérdida, o evitar el sentir su partida (lo cual se puede trabajar más adelante). Otros simplemente pudieran sentir que ya completaron la despedida en casa o en el hospital. Algunos prefieren recordarla como era en vida y vivir su duelo de forma muy privada.  Hay quienes se niegan a asistir, pues en el fondo creen que es una forma de “castigar” a quien tal vez les hizo daño en vida. Sea cual sea la razón, es una decisión muy personal que se debe respetar, pues en ese preciso momento es lo que mejor le funciona.  Y si con el paso del tiempo llega el arrepentimiento o la culpa de no haber asistido, hay formas de trabajarlo.

En conclusión, tú decides si quieres ir, si puedes ir, o si estas listo para asistir al funeral y sepelio de tu ser querido.  Debes hacer lo que mejor te funcione en el momento de la pérdida, y también asegurarte de no tardar mucho tiempo en trabajar completamente tu duelo, para que quede sanamente cerrado ese capítulo de tu vida. 

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jueves, 2 de enero de 2025

Del libro: “Un alma valiente” de Nick Vujicic - Bullying cibernético

 

Del libro: “Un alma valiente” de Nick Vujicic

 

Evita el bullying cibernético

Diez consejos clave para adolescentes

 



1.-  INFÓRMATE.

                Para impedir que el bullying cibernético ocurra debes entender exactamente qué es.  Investiga en qué consiste el bullying cibernético, al igual que cómo y cuándo es más probable que suceda. Habla con tus amigos sobre lo que están viendo y viviendo.

2.-  PROTEGE TU CONTRASEÑA

                Protege tu contraseña y demás información privada de miradas metiches. Nunca dejes contraseñas ni otros datos de identificación donde los demás puedan verlos. Además, nunca le des a nadie esta información, ni siquiera a tu mejor amigo. Si alguien más la conoce, ¡tómate el tiempo de cambiarla en este mismo momento!

3.-  NO TENGAS FOTOS EXPLÍCITAS

                Antes de postear o enviar esa foto sexy que te tomaste, piensa si es algo que te gustaría que vieran tus padres, tus abuelos y el resto del mundo. Los agresores pueden usar esta imagen como munición para hacerte la vida miserable.

4.-  NUNCA ABRAS MENSAJES DE ALGUIEN QUE NO CONOCES O DE ALGO QUE NO PEDISTE.

                Nunca abras mensajes (correos electrónicos, mensajes de texto, mensajes de Facebook, etc.) de personas que no conozcas o que sepas que son agresores. Bórralos sin leerlos. Podrían tener un virus que infecte tu aparato automáticamente si los abres. Además, nunca hagas clic en enlaces que te hayan enviado personas que no conoces. También podrían contener un virus diseñado para recabar toda tu información personal.

5.-  DESCONÉCTATE DE CUENTAS EN LÍNEA.

                No guardes contraseñas en formatos de sitios de Internet ni en el buscador de tu computadora por comodidad y no te mantengas conectado cuando te alejes de tu computadora o teléfono celular. No le des a nadie la menor posibilidad de navegar con tu identidad desde tu aparato. Si olvidas cerrar tu sesión de Facebook al usar la computadora de la biblioteca, la próxima persona que use esa computadora podría entrar en tu cuenta y ocasionarte serios problemas.

6.-  HAZ UNA PAUSA ANTES DE PONER UN COMENTARIO.

                No comentes nada que pueda poner en riesgo tu reputación.  Las personas te juzgarán según lo que pareces ser en Internet. También te darán o te negarán oportunidades (empleos, becas, pasantías) con base en eso.

7.-  GENERA CONCIENCIA.

                Comienza un movimiento, crea un club, haz una campaña y organiza un evento que genere conciencia sobre el bullying cibernético. Aunque tal vez tú entiendas de qué se trata, hasta que los demás no estén conscientes, no podremos realmente impedir que ocurra.

8.-  PON CONTROLES DE PRIVACIDAD.

                Restringe el acceso a tu perfil en línea sólo a tus amigos de confianza. La mayor parte de los sitios de Internet como Facebook y Google+ te ofrecen la posibilidad de compartir cierta información únicamente con amigos, pero hay que configurarlo para asegurar máxima protección.

9.-  BÚSCATE EN GOOGLE.

                Pon tu nombre a menudo en los buscadores más importantes (por ejemplo, Google, Bing, Yahoo). Si aparece alguna fotografía o información personal que pueda ser usada por los agresores cibernéticos para acosarte, haz lo que sea necesario para que la quiten antes de que se convierta en un problema.

10.-  NO SEAS UN AGRESOR CIBERNÉTICO.

                Trata a los demás como te gustaría que te trataran. Si te portas como un patán con los demás en Internet, estás reforzando la idea de que ese comportamiento es aceptable.

 

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